Han pasado más de 50 años desde que aparecieron los primeros lenguajes de programación para niños, los cuales están pensados tanto para los que están intentando aprender inglés como para los que no tienen todavía suficientes conocimientos en la lengua ni en lenguajes de programación.
El pionero al respecto fue Symour Papert, que inventó el lenguaje de programación “Logo” en el año 1968. Funcionaba como un instrumento didáctico para que los niños, especialmente los más pequeños, pudieran construir conocimientos. Para ello, se creó un robot llamado tortuga de Logo para que los niños pudieran aprender a resolver problemas y desarrollar su proceso de pensamiento lógico y matemático.
Otra herramienta fue Scratch, basada en las primeras ideas de Papert sobre niños y computadoras. Menos complejo que los lenguajes de programación habituales, pero igual de expresivo y poderoso. Los niños no necesitan aprender inglés con él, aunque siempre es un extra destacado en la programación.
A día de hoy, Scratch es una buena idea para niños que quieran introducirse en el mundo de la programación.
Blocky es una librería de programación visual que permite que los niños aprendan a programar por medio de bloques que se convierten en código real a través de una sencilla interfaz.
Tynker es un sistema de aprendizaje para niños que les enseña a programar empezando con bloques visuales y avanzando hacia la programación de texto a medida. Así, pueden construir minidrones, juegos móviles y mucho más.
Alice es otro entorno de programación gratis en código abierto y 3D que enseña la programación orientada a eventos y objetos para animar objetos y crear programas.
Un lenguaje de programación para adultos que se adapta muy bien a los niños es Phyton, un lenguaje con una sintaxis sencilla y multiplataforma que se utiliza sobre todo para desarrollo web.
A partir de los 7 a 9 años, los niños pueden introducirse en lenguajes como Code.org, ya que es sencillo y dispone de muchos tutoriales.
Aprender inglés para programar mucho mejor es sin duda una gran ventaja para los que quieren mejorar en su programación, pero antes que nada sí que hay lenguajes de programación para niños que hacen los inicios en este sector más sencillos y divertidos.